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Nov
7 sitios de moda donde tomar vermut junto a unas tapas
¿Qué significa ir a hacer el vermut en Barcelona?
El vermut es una costumbre muy típica de Barcelona que consiste en reunirse al mediodía para compartir un aperitivo, previo a la comida, en compañía. En los últimos años ha vuelto a ganar nuevos seguidores y por eso, a parte de los clásicos de toda la vida, son muchos los establecimientos que han abierto para destacar la costumbre de hacer el aperitivo.
Barcelona es una ciudad repleta de arte y con una cultura plasmada en sus principales monumentos, ramblas o mercados, repartidos entre sus calles, todos estos destinos turísticos son imprescindibles en tu visita Ciudad Condal, pero ¿qué mejor que subir tu experiencia como un auténtico local? Desde Midtown Luxury Apartments te proponemos hacer algo típico de aquí y te mostramos distintas opciones para disfrutar del vermut en la ciudad.
7 sitios de moda para hacer el vermut en Barcelona
Quimet & Quimet
Estamos ante un clásico del vermut toda la vida, se encuentra en C/Poeta Cabanyes 25, a 10 minutos andando de Charming Flats, y es uno de los más veteranos de la ciudad. Quimet &Quimet es una bodega que no sólo sirven uno de los mejores vermuts de grifo, también cuenta con cervezas propias y una gran variedad de vinos.
Otra razón para visitar este pequeño local es su amplia variedad de tapas originales, su carta combina las tapas y conservas de toda la vida con originales montaditos. Lo mejor es dejarse asesorar y,a pesar de ser un local pequeño, vale la pena acercarse a un sitio con más de un siglo y cuatro generaciones de “Quimets”.
Senyor Vermut
En este caso se trata de un local muy nuevo, que abrió sus puertas en 2013, pero ya se ha convertido en un feudo para los amantes del vermut sin límites por sus 40 variedades distintas de este mágico brebaje.
El local de Jordi Miralles tiene mucho encanto, de estilo retro, techos altísimos, paredes de piedra y una terraza bien orientada al sol. Se encuentra en C/ Provença 85, en la parte alta del Eixample Esquerra y su clientela es muy variada, entre un ambiente hípster y familiar.
Bodega 1990
De nuevo encontramos un excelente local abierto en 2013, en el que se sirve vermú, conservas, embutidos y salazones de la mano de Albert Adrià, renovada con aires de antaño esta bodega se encuentra en la C/Tamarit, 91, justo enfrente e otro de los locales del sello e los hermanos Adrià, Tickets.
Sirven su propia línea de vermut, La Cala, elaborando recetas tradicionales, como los guisados de la casa y otras desde su perspectiva actual sobre el tapeo, como sus famosos torreznos de nori con sésamo.
La Bodegueta de Cal Pep
Apartados de la zona turística de Barcelona, en pleno barrio de Sants, se encuentra La Bodegueta de Ca’l Pep, un clásico que desde 1929 ha perdurado en el tiempo manteniendo la misma esencia de bodega de toda la vida. Situada en C/ Canalejas, 12 y dado que no se encuentra en ninguna calle comercial, su clientela es, puramente autóctona del barrio. Se sirve un vermut casero y se suele combinar con tapas tradicionales de pescado o conservas de calidad muy bien valoradas por sus clientes.
Más allá de paredes con alacenas llenas de sifones antiguos y botellas de cristal vacías, se puede decir que la única decoración que llama su atención son unas autenticas neveras de madera que le da un toque vintage totalmente involuntario por los dueños del local, quienes ejercen de camareros del local. Un lugar con encanto de toda la vida, dónde además se puede comprar vino y llevarlo en una bota de vino cómo se hacia antiguamente.
Casa Mariol Wine Bar
Otro lugar ideal para hacer el aperitivo el local de la bodega Casa Mariol, el Casa Mariol Wine Bar, al lado de la Sagrada Familia. Dentro de un ambiente muy cool y joven, sus clientes recomiendan su vermut casero. Además, se puede encontrar el Suau, la versión actualizada de una bebida, mezcla de gaseosa y café, que triunfó en la Ribera del Ebro hace décadas.
También se pueden probar vinos del Ebro a granel, comer una buena clotxa —pan relleno de sardinas, cebolla, tomate y ajo— y rematarlo con unos buenos pasteles de Batea. Otra curiosidad es que se puede comprar vermut y vino a granel.
Morro Fi
Considerado uno de los mejores lugares de culto del vermut. Un bar pequeño, sin mesas en el interior y con una terraza soleada, dónde sirven aperitivos de primera, especializados en el vermut, incluso sirven su propia marca. El local situado en el Eixample, se encuentra en C/Consell de Cent, 171, es la vermoutería hípster por excelencia.
Sus dueños son una pareja de exblogueros que vieron en su afición una forma de negocio más que rentable, ya que la idea surgió a raíz de un blog de gastronomía en el que se recomendaban sitios de Barcelona. De hecho, gracias a su éxito, han trasladado su concepto al barrio de Sant Gervasi bajo un nuevo nombre y local Mitja Vida, e incluso una tercera apertura, Dalt De Tot, un local situado cerca de su segunda local, aunque más grande que sus predecesores.
Bar Calders
Nuestra última apuesta se encuentra en el barrio de Sant Antoni,situado en el C/ Parlament 25. Se trata de un bar de barrio ideal para tomar un vermut casero y unas sabrosas tapas, su nombre rinde homenaje al poeta catalán Pere Calders, dentro del local se puede encontrar algún que otro detalle suyo.
El Calders es quizás el mejor exponente del nuevo vermuteo, moderno pero bien entendido. Cervezas de importación, vermut casero -de cuatro tipos distintos-, fritos y conceptos de tapas con una fusión justa. El mayor atractivo del bar es su tranquila y colorida terraza que combina el estilo rústico catalán con un toque andaluz.
